Sentirse rechazado en una sociedad como en la que vivimos es experimentar una de las sensaciones más incómodas y casi siempre, frustrantes. Es incómodo sentir que le podes confiar a alguien todo lo que sentís o lo que te pasa y que no exista respuesta de esa persona. Cuando no hay un ida y vuelta, eso es sentirse rechazado. Porque por más esfuerzo que uno ponga para luchar contra eso, a veces no recibe realmente lo que esperaba. Y eso es lo que nos lleva a la mera frustración. Nos deprime el pensar que podemos y que después de un gran esfuerzo no encontramos la respuesta esperada. Nos deprime el pensar que uno hizo las cosas con la mejor voluntad y que hay alguien, del otro lado, que en vez de realizar una crítica constructiva, nos rechaza. Simplemente, un rechazo.
Quien está del otro lado muchas veces no comprende el esfuerzo que uno pone, la voluntad que tiene.
A veces sin importarles eso, simplemente nos rechazan. Nos dejan apartados de lo que deseamos. Y básicamente, dejan o permiten que nuestros sueños, que nuestras metas a alcanzar se borren así, como si nada. Y todo esto hace que durante la frustración, lleguemos a creer que todos los intentos, los sueños, los esfuerzos, no sirvan para nada. Nos hacen creer lo increíble, lo que nunca esperábamos creer. Simplemente, nos arruinan los sueños. Y justamente creo, que son esas las personas que no han logrado alcanzar sus propios sueños o metas. Y puede ser también que ni siquiera tengan sueños o metas. Y mediante aquella frustración que también puede llegar a ser parte de un resentimiento, nos dejen a nosotros sin sueños, sin metas.
Y personalmente creo, que a pesar de todas aquellas personas que nos “tiran abajo”, que nos dejan sin aliento, que no nos alientan a seguir, que nos dejan estancados en el camino, uno siempre tiene que buscar lo que realmente desea. Tiene que ir en busca de esos sueños, de esas metas. Tiene que seguir luchando, debe alcanzarlo. Porque no hay frustración más grande que una persona que no sea ajena a uno mismo, pretenda conocerte mejor, o corregirte, o “tirar abajo” esos sueños que vos fuiste cosechando en el día a día.
Quien está del otro lado muchas veces no comprende el esfuerzo que uno pone, la voluntad que tiene.
A veces sin importarles eso, simplemente nos rechazan. Nos dejan apartados de lo que deseamos. Y básicamente, dejan o permiten que nuestros sueños, que nuestras metas a alcanzar se borren así, como si nada. Y todo esto hace que durante la frustración, lleguemos a creer que todos los intentos, los sueños, los esfuerzos, no sirvan para nada. Nos hacen creer lo increíble, lo que nunca esperábamos creer. Simplemente, nos arruinan los sueños. Y justamente creo, que son esas las personas que no han logrado alcanzar sus propios sueños o metas. Y puede ser también que ni siquiera tengan sueños o metas. Y mediante aquella frustración que también puede llegar a ser parte de un resentimiento, nos dejen a nosotros sin sueños, sin metas.Y personalmente creo, que a pesar de todas aquellas personas que nos “tiran abajo”, que nos dejan sin aliento, que no nos alientan a seguir, que nos dejan estancados en el camino, uno siempre tiene que buscar lo que realmente desea. Tiene que ir en busca de esos sueños, de esas metas. Tiene que seguir luchando, debe alcanzarlo. Porque no hay frustración más grande que una persona que no sea ajena a uno mismo, pretenda conocerte mejor, o corregirte, o “tirar abajo” esos sueños que vos fuiste cosechando en el día a día.
SMV
quee buena fotoo loocoo, siempre quise hacer un cartel asi!
ResponderEliminarmuyy buenos loss ultimoss doss (tuve tiempo a leer soloesos dos).
porr hacerloss muy largos te repetiss un pocoo , pero es lo de menoss! criticaa constructiva eh ! jjejeje
un besoo!
julss